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Mercedes-Benz Clase A más de 20 años

• Quién se atreve a ganar: mirando hacia atrás, pudo haber sido el principio guía para el desarrollo y lanzamiento al mercado de la Clase A de Mercedes-Benz. En marzo de 1997, la marca dio a conocer su nuevo modelo al público en el Salón del Automóvil de Ginebra. 

• Su lanzamiento atrajo mucho la atención, pero tiempo después recibió algunas críticas. Sin embargo, Mercedes-Benz reaccionó rápidamente, equipando el Clase A con un chasis modificado y ajustando el Programa Electrónico de Estabilidad ESP® de serie.

• Así comenzó la historia de éxito de la Clase A, que aún continúa con la tercera generación ahora en el mercado. Esta clase ha conformado una familia de modelos juveniles propia y juega un fuerte papel en el rendimiento de ventas de la marca Mercedes-Benz.

 

Vision A93 Concept Car de 1993

 

Texto: Daimler Colombia

 

Vision A93 Concept Car de 1993

Mercedes-Benz dio un primer adelanto de la futura Clase A en el Salón Internacional del Automóvil (IAA) en Frankfurt de 1993, donde la marca presentó un estudio cercano a la producción titulado "Vision A 93". El vehículo con tracción delantera causó bastante sensación. Se expuso un efecto impresionante de cómo Mercedes-Benz logró por primera vez, resolver uno de los compromisos clásicos del desarrollo automovilístico: la Clase A reunió dimensiones exteriores compactas, un interior espacioso y versátil, así como el alto estándar de la marca en seguridad dentro de un concepto global único. Esto hizo que la "Visión A 93" fuera mucho más que un estudio de diseño o tecnología. De hecho, mostró a la marca el camino hacia adelante en un segmento de mercado hasta ahora indefinido. Por lo tanto, tuvo un impacto decisivo en el desarrollo de la futura Mercedes-Benz Clase A (W 168).

 

 

El lanzamiento del vehículo ingeniosamente compacto fue anclado en la extensa iniciativa del modelo Mercedes-Benz en ese momento. Esto marcó la expansión de la marca en nuevos segmentos del mercado. La Clase A, por ejemplo, sirvió para extender el portafolio. El compacto SLK Roadster (1996) representó un cambio más significativo hacia el sector del estilo de vida y en 1997, la llegada de la Clase M creó el segmento de Vehículos Utilitarios Deportivos (SUV), que sigue siendo de gran importancia actualmente.

 

 

 

Amplitud y seguridad en un automóvil de tamaño mediano

 

La versión de producción de la Clase A fue presentada al público en marzo de 1997 en el Salón del Automóvil de Ginebra. La nueva serie de modelos incorporó más de veinte innovaciones técnicas que nunca antes se habían visto en este segmento de vehículos. La pieza central era la nueva carrocería revolucionaria con una cavidad entre el compartimiento de pasajero y el piso. Esto formaba parte del sofisticado concepto de seguridad, al mismo tiempo que proporcionaba espacio para los componentes de posibles sistemas de accionamiento alternativos futuros, como baterías o tanques de hidrógeno.

 

 

Cuando se trata de amplitud y seguridad, la clase A coincide con el estándar de un vehículo de tamaño mediano. La innovadora unidad de asiento trasero y la opción de un asiento removible del acompañante le dieron la versatilidad de un mini monovolumen y permitieron que el cinco plazas se transformara en un cuatro, tres, dos o incluso un monoplaza. En total, hubo una selección de 72 variaciones de asientos diferentes, mientras que la Clase A tenía la capacidad de carga de un automóvil de gran tamaño: dependiendo de la posición de los asientos traseros, había de 390 a 1340 litros de espacio, lo que podría aumentar Incluso a 1740 litros sacando el asiento del pasajero delantero. El piso nivelado, el portón trasero grande y el faldón bajo del maletero hicieron más fácil cargar el baúl.

 

 

Cuando se trata de seguridad pasiva, la nueva gama de modelos era del mismo nivel que el ejemplar Mercedes-Benz Clase E. Esto se debió en parte no sólo al principio de diseño, sino también a los sistemas de retención instalados de serie que habían sido especialmente adaptados al diseño de la Clase A. Los modelos de la primera generación contaban con las siguientes motorizaciones de cuatro cilindros 1.400 c.c en el A 140 que produce 82 HP, 1.600 c.c en el A 160 de 102 HP, a los que se sumaba el de 1.900 c.c que se usaba en los A190 con una potencia de 125 HP y el motor más grande era el de 2.100 c,c usado en los A210 que gracias al montaje de un turbo producía 140 HP. Completando el portafolio con una propulsor diésel de 1.700 c.c con turbo opcional e inyección directa common rail que erogaba potencias de 60 HP,75 HP,90 HP y 95 HP. 

 

 

El Facelift del año modelo 2001 anunció numerosas modificaciones, algunas de ellas muy extensas, así como una versión extendida por 170 milímetros (V 168). Los primeros Windowbags de gran formato, equipados por primera vez por Mercedes-Benz en la Clase S, también estaban disponibles para la Clase A como opción. Esta segunda generación ofrecía los siguientes motores de cuatro cilindros, arrancaba con uno de 1.500 c.c de 95 HP. 1.700 c.c de 116 HP y 2.000 c.c de 136 HP sin turbo y de 193 HP con sobrealimentación. Con la posibilidad de contar con un propulsor diésel de 2.000 c.c dotado de inyección directa common rail, cuatro válvulas por cilindro con o sin turbo y potencias de 82 HP,109 HP y 140 HP.

 

 

Además de mejorar el portafolio de modelos, también se necesitó aumentar la capacidad de producción para la serie W 168 de la clase A. La entonces Daimler-Benz AG optó por una nueva planta situada en la ciudad alemana de Rastatt, que fue inaugurada oficialmente en mayo de1992. Al principio, las carrocerías pintadas para los modelos medianos de Sindelfingen se sometieron a su montaje final antes de que Rastatt se convirtiera en la Planta de producción para la Clase A.

 

 

 

 

 

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