Por : Roberto Nigrinis

Se partió de la misma plataforma, pero se logró mayor espacio interior, mejor aerodinámica una sensación de manejo cercana a la de un automóvil y superiores niveles de seguridad activa y pasiva, lo que se traduce en poder disfrutar realmente de la conducción. La verdad debemos reconocerlo, ¿Sería cierta tanta belleza? Debemos reconocerlo, teníamos nuestras dudas, las cuales fueron superadas con suficiencia durante una breve sesión de manejo.

Es suave, muy silenciosa, perfectamente insonorizada, con un gran equilibrio en sus suspensiones independientes, al malgamar de manera magistral, suavidad con rigidez, lo que permite viajar como en una gran berlina, con la tenida en curva y la estabilidad de un automóvil de prestaciones deportivas.

Precisamente hablando de prestaciones, capitulo aparte merece el motor, un poderoso V6 a 60 grados, con 3.400 c.c, 24 válvulas, con ejes de levas simples para cada culata, los cuales reciben el apoyo en su gestión del sistema Ivtec, accionado electrónicamente, que abre y cierra las válvulas en el momento óptimo de funcionamiento, o sea cuando produce mayor potencia, más torque, con menor consumo de combustible y menos contaminación ambiental. Este motor que produce 255 HP, si como lo lee, -doscientos cincuenta y cinco caballos de potencia-, es el mismo que conocemos en el S.U.V Honda Pilot, lo que nos garantiza rendimiento de sobra, para mover la Odyssey que pesa un poco más de dos toneladas. También se cuenta con una caja de 5 cambios automática

Si la tecnología es de punta, los acabados y la ergonomía del vehículo apuntan en la misma dirección. Cuero en las sillas, multiplicidad de opciones abatiendo o retirando las bancas, sobresaliendo la tercera, que con un simple movimiento se recoge y oculta en el piso en un abrir y cerrar de ojos. Dirección de cremallera con asistencia y frenos de disco en las cuatro ruedas más EBD, contribuyen a que la conducción sea todo un placer.

Otro aspecto destacable es la inmensa caja porta objetos giratoria, ubicada en el piso del vehículo, la cual permite guardar hasta objetos delicados o valiosos, ya que al cerrar su tapa, la bandeja giratoria queda fija y si se desea la tapa cuenta con llave.

La seguridad de los ocupantes también esta bien estudiada, 12 airbags, si DOCE, como lo lee, 12 bolsas de aire repartidas a lo largo y ancho del amplio habitáculo son las encargadas de salvaguardar la integridad de hasta los 9 pasajeros que pueden viajar en la Odyssey, los cuales también cuentan con cinturones de seguridad de tres puntos con sistema de pretensión. La cabina no es sólo más aerodinámica, sino que además ha sido rediseñada para ofrecer mayor protección en caso de un choque, al ofrecer mayor capacidad de absorción de energía al momento de una colisión, lo cual lo certifican las cinco estrellas (máxima calificación) obtenidas durante las exigentes pruebas a que fue sometida por la NHTSA (Us Nacional Highway Traffic Safety Administration).

Durante la breve prueba de manejo, la cual pudimos llevar a cabo gracias a la gentil colaboración de la revista Car and Driver edición Colombia- Venezuela, pudimos comprobar que todo lo que se nos había dicho durante la presentación era cierto.

La nueva Odyssey, es un vehículo muy agradable de conducir, de comportamiento muy amañador y con un rendimiento mecánico sobresaliente, digno de un sedán Premium alemán. Todo enmarcado en acabados sobrios y accionamiento de mandos donde se trabajó con gran cuidado la ergonomía.

Además resulta interesante resaltar la facilidad de acceso a las plazas posteriores, debido a la amplitud de las puertas traseras, que no sólo son amplias, sino que además cuentan con accionamiento eléctrico para abrirlas o cerrarlas y que como norma de seguridad detiene su funcionamiento al detectar algún obstáculo, por pequeño que sea, evitando causar lesiones a los ocupantes. Estas puertas traseras además incluyen algo poco habitual en este tipo de vehículos, vidrios descendentes completamente. Esto último no será tan importante

Para muchos, ya que la Odyssey cuenta con aire acondicionado de tres zonas, una para el conductor, otra para el copiloto y la restante para los pasajeros, que tiene a su disposición ventilas exclusivas para ellos y la posibilidad de graduar la temperatura a su gusto, gracias a mandos independientes.

Lo único que podemos criticar en la excelente Honda Odyssey, es su mínima altura de despeje al piso, lo que se agrava al tener tanta distancia entre ejes. Claro que comprendemos que nuestras calles y carreteras no son las ideales, ni para este ni para otros vehículos ideales para otros lugares, que sufren mucho en las vías locales.