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El Peugeot que utilizó el Papa Juan Pablo II en Normandía en 1980

•      A principios de la década de los 80, el PEUGEOT 604 era el buque insignia de PEUGEOT y el Presidente de la República Francesa, Giscard d'Estaing, pidió a la marca poder utilizar un 604 Limousine para los desplazamientos del Papa durante una visita.

•      Desarrollado a partir de una de las 124 unidades alargadas construidas por el carrocero francés Heuliez, fue encontrado de forma casual tras haber sufrido modificaciones.

•       Hoy, restaurado en su forma original, se exhibe en Italia, en la Galería PEUGEOT de San Gimignano en la Toscana.

 

Hace cuarenta años el Papa Juan Pablo II visitó la ciudad de Lisieux, en Normandía, el 2 de junio de 1980, para rezar y rendir homenaje a Santa Teresa de Lisieux dentro de la gran basílica dedicada a ella en 1937. Para los desplazamientos del Pontífice en esa ocasión especial, el presidente de la República Francesa de esa época, Giscard d'Estaing, pidió a PEUGEOT un 604 Limousine desarrollado por el carrocero Heuliez sobre la base de la berlina de alta gama de la marca.

 

Giscard d'Estaing, gran usuario del buque insignia de PEUGEOT, animó firmemente a la firma del león a crear una limusina sobre esta base para que fuese utilizada como vehículo representativo de la Presidencia de la República Francesa. A su vez, cuando realizaba una visita oficial a otros países, el presidente francés solía usar un PEUGEOT 604.

 

Sin embargo, la génesis del PEUGEOT 604 Limousine no fue sencilla: aunque el primer prototipo se presentó en 1978, su producción no comenzó hasta finales de 1979 y a principios de 1980 estuvieron disponibles una decena de unidades realizadas sobre la base del 604 SL, 604 D turbo y 604 TI, con una marcada preferencia en el color gris ahumado metalizado. Al comienzo de la primavera de ese mismo año la red comercial de la marca comenzó a recibir los primeros pedidos de la versión alargada, pero la homologación oficial de la motorización no llegó hasta mitad de junio y las primeras entregas a clientes se realizaron en julio.

 

Para cumplir con la solicitud del presidente Giscard d'Estaing, PEUGEOT sacó de su parque la limusina número 9500010 y se la envió de nuevo a Heuliez para realizar las modificaciones necesarias: instalar un techo corredizo, una barra de sujeción interna y una tarima en lugar de los asientos plegables. El automóvil así preparado regresó al parque PEUGEOT justo a tiempo para el evento del 2 de junio, pero quedaba por resolver un problema no secundario, todavía no se había obtenido la homologación del motor, lo que se resolvió colocando una placa de matrícula temporal. Esa fue la primera vez que un PEUGEOT 604 Limousine desfilaba por carretera en un evento público. Ese día, abrían y cerraban el cortejo papal varios PEUGEOT 504 y 604, todos de color gris metalizado.

 

Tras la visita de Juan Pablo II a Lisieux, la limusina PEUGEOT 604 fue enviada de regreso a Heuliez para eliminar todos los cambios realizados y devolverla a su configuración original. De esta manera, regresó más tarde al parque PEUGEOT, se vendió como vehículo de segunda mano y comenzó una nueva vida que lo llevó a las costas del Mediterráneo en la década de los noventa, concretamente a Marsella, donde fue reconvertido en una limusina de estilo americano. Pintada de blanco (con brocha) y con una falsa antena de televisión en forma de boomerang en el capó trasero, fue la acompañante de un fotógrafo que transportaba a parejas jóvenes recién casadas con presupuesto limitado.

 

 

Este exclusivo vehículo, fue rescatado por un fan que lo guardó en la bodega de un pequeño productor de champán en la región de Champagne Ardenne, donde fue olvidada por un tiempo en medio de botellas de vino.

 

Sin embargo, desde hacía tiempo algunos buscaban uno de los 124 ejemplares de Limousine únicos fabricados por Heuliez entre 1980 y 1985. Aunque este modelo no tenía buen aspecto, mantuvo su interior original en excelentes condiciones, así como el motor PRV de 2.664 cm3 caracterizado por el ángulo particular de 90 ° entre las bancadas de los cilindros. Un motor robusto que se destacó incluso en esa ocasión, arrancando a la primera y con su típico sonido.

 

Así fue como esta unidad 604 Limousine llegó a Italia, concretamente a la Toscana, a la Galerie PEUGEOT, donde fue inmediatamente sometida a una importante restauración. Nadie conocía la verdadera historia de ese chasis tan particular, que hasta entonces había estado oculto entre los documentos de la época. Fue gracias a la curiosidad de un miembro del Club PEUGEOT 604, que visitó la sede de Heuliez para estudiar toda la documentación relacionada con estas limusinas y descubrió la verdadera historia de esta unidad.

 

Hoy, el PEUGEOT 604 Limousine Heuliez con chasis número 10 se exhibe con su uniforme original en la Galería PEUGEOT de San Gimignano recordando con alegría el recorrido papal en 1980.

 

 

 

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