Ssang Yong, mezcla magistral

El diseño de la carrocería corre por cuenta de la casa italiana. Está muy bien logrado en términos generales, aunque vale la pena resaltar que la visibilidad posterior, desde el puesto de conducción, no es tan perfecta como se quisiera, lo que obliga a utilizar de manera escrupulosa los tres espejos disponibles, so pena de rayones o golpes menores al retroceder. El espacio interior, que recibe tapicería en cuero de fabricación nacional, está muy bien logrado, es funcional y ergonómico. Sobresaliendo por su equipamiento, en el que el aire acondicionado, la dirección asistida y las múltiples graduaciones de las sillas tanto adelante como atrás, donde incluso se puede pedir a precio extra una tercera banca de asientos, que permitirán llevar hasta siete pasajeros, todos muy cómodos y con cinturones de seguridades de tres puntos con sistema de pretensión. Los vehículos probados no incluían airbag, pero estos están disponibles en las versiones full equipo.

Tuvimos a disposición dos camionetas, una dotada de caja automática de cuatro velocidades y la otra con transmisión manual de cinco. Las dos funcionaron perfectamente, aunque debemos resaltar que nuestro gusto personal apunta a la primera, por comodidad. Las dos tipos de cajas de velocidades mostraron una perfecta armonía con el motor de origen Mercedes Benz de cinco cilindros, que no es el más moderno, pero ha demostrado su fortaleza y longevidad por más de dos décadas, lo que en un vehículo de estas características resulta muy importante. La producción de potencia de este es de 120 HP, lo que resulta suficiente para mover esta mole de dos toneladas, aunque vale la pena decirlo, no tiene la aceleración de un deportivo, pero tiene un comportamiento decoroso. Además cuenta con turbo e Intercooler. Uno de los aspectos que más nos impresionó favorablemente, fue la insonorización del motor, que en muchas ocasiones nos hizo olvidar que conducíamos un vehículo con propulsor diesel, dado su bajo nivel sonoro.

El funcionamiento de las cajas de velocidades es irreprochable. La caja manual de cinco velocidades se acciona con gran precisión y su escalonamiento en cuanto a relaciones es apropiado. La caja automática, de cuatro velocidades se comporta bien, aunque las relaciones son un tanto largas.

Sus suspensiones de espirales, adelante con esquema independiente y atrás con eje rígido y resortes, resultan amables pese a su gran fortaleza fuera del camino, a la vez que ofrecen buen despeje del piso. Su ángulo de ataque de 29 grados y el de salida de 25 resultan más que suficientes para sortear bien los obstáculos que nos podemos encontrar fuera del camino asfaltado.

Los frenos de disco en las cuatro ruedas, detienen al Rexton con suavidad y precisión. La dirección asistida de cremallera, montada muy abajo del vehículo, ofrece un comportamiento sin reproches. Utiliza llantas de 16 pulgadas de labrado mixto, lo que resulta favorable a nivel de adherencia y bajo nivel sonoro al circular por asfalto, pero por el contrario poco agradable y seguro cuando se usa en terreno suelto y peor mojado, cuando adolece de agarre suficiente.
En conclusión, si usted quiere un buen vehículo, con el que pueda llevar seis pasajeros cómodamente aparte de usted, le conviene mirar la Rexton Además, la motorización diesel Mercedes Benz, lo mismo que la caja y la transmisión del mismo origen y con la opción de activar y desactivar el 4x4 a voluntad, son argumentos que le pueden sonar interesantes y que en nuestro concepto merecen ser tenidos en cuenta. Especialmente el del motor alimentado por a.c.p.m, que ya casi cuesta la mitad del valor de la gasolina extra.

El recién llegado, ya muestra cifras interesantes en ventas. Llega traído por Colyong, empresa muy cercana a Colwagen, que representa a la afanada marca alemana Audi.