Prueba Renault Sandero Automático

Prueba Renault Sandero Automático

 

Ofrece una carrocería moderna y con un buen trabajo en la parte aerodinámica, lo que sin duda además de práctico y funcional resulta atractivo a la vista de quien lo mire.

Texto y Fotos: Roberto Nigrinis y Renault Sofasa


Las cinco puertas le abren otro espectro de utilización diferente al del Logan. Con la silla trasera puesta la capacidad del baúl llega a los 320 litros y con esta abatida completamente aumenta hasta los 1.200 y un poco menos si se abate 60% o 40% únicamente lo que incrementa sus posibilidades de utilización.


Al interior del habitáculo se accede por puertas de buenas dimensiones, y una vez allí el espacio es muy generoso, destacándose la amplitud vertical que al igual que en el Logan permite alojar pasajeros de gran talla sin que estos se golpeen la cabeza contra el techo.
En cuanto acabados están bien logrados y el ajuste y óptimo encastre son unas de sus bondades. Las sillas tapizadas en colores modernos pero muy sobrios hacen su contribución al decorado. Las delanteras permiten una amplia opción de graduaciones lo que permite viajar con buena comodidad.


El piloto cuenta con un completo panel de instrumentos, en el que sobresalen los relojes en color blanco, que le dan una imagen muy atractiva, a la vez que cumplen con su misión de informar sobre el funcionamiento del auto sin reproches.
Como equipo de norma incluye dirección de cremallera con asistencia, y según la versión aire acondicionado, bloqueo central  y airbags delanteros para piloto y copiloto, así como exploradoras, rines de lámina o de aleación ligera.


Aspectos mecánicos
Está propulsado por un motor de cuatro cilindros en línea, montado adelante de manera transversal, el cual con sus 1.598 c.c de desplazamiento y 16 válvulas, le permite producir 110 HP/5.750 rpm y un torque de 15,10 Kgm/3.750 rpm, con un índice de compresión de 10 a 1. Este motor es el mismo que ya conocimos montado en los Renault Scenic, Megane I, al igual que en los actuales Clio y Symbol.


La planta motriz está acoplada a una caja de cambios automática de cuatro velocidades adelante accionada mediante una precisa y suave palanca ubicada en la consola central. Esta caja cuenta con unas relaciones de caja y final de eje magistralmente calculadas por los ingenieros de la planta de Renault en Ruitz Francia que pesa apenas 65 kilos y no necesita mantenimiento sino hasta los 300.000 kilómetros, además esta caja ofrece la opción de manejo secuencial que permite aprovechar cada uno de los caballos de potencia y los Kgm de torque del motor, en nuestra exigente topografía de montaña, como en el terreno plano para ofrecer una óptima respuesta sin afectar el consumo bajo de combustible, que disminuye un poco más con el uso de esta caja con gestión electrónica que memoriza los hábitos de manejo del conductor.


Las suspensiones adelante tipo McPherson, y atrás de eje flexible en H, son ideales para nuestras vías, lo que se ve reforzado por ruedas de 15 pulgadas lo que se traduce en un vehículo alto, capaz de transitar por nuestras vías con la tranquilidad de saber que no se golpeará por debajo. Además el equilibrio entre suavidad para los pasajeros y tenida en curva es bastante bueno.
El sistema de frenos con discos ventilados adelante y campana atrás con ABS y EBD según las versiones, detienen el carro con total eficiencia. La unidad probada correspondiente a la serie Dynamique contaba con el equipo completo.


Sensación de Manejo
Al abordarlo la sensación es de amplitud total, lo que se incrementa por la claridad interior que se ve favorecida por ventanas amplias. Este aspecto se resalta con la estupenda visibilidad frontal, lateral y posterior algo que nos agradó sobremanera. Al estacionar en reversa no es necesario utilizar en demasía el trío de espejos, ni mucho menos se requiere el instalar un asistente electrónico de parqueo. En este auto, los diseñadores de Renault rescataron un aspecto olvidado por los diseñadores modernos de la mayoría de las marcas a nivel mundial, que hay conductores a quienes les gusta contar con una buena visibilidad, sin puntos ciegos ubicados generalmente en los parales traseros.
También se destacan las luces delanteras halógenas, que ofrecen una gran luminosidad y que en la versión superior reciben el apoyo de las exploradoras.

La llanta de repuesto ubicada en la parte exterior no quita espacio en el baúl


El ajuste tanto interior como exterior es estupendo, el comportamiento en ruta es suave y placentero y el comportamiento del motor muy bueno, tanto en respuesta al requerir acelerar como en bajo consumo de combustible. En estos aspectos entran a jugar de manera importante y decisiva las bien escogidas relaciones de caja y final de eje.
El funcionamiento de la caja es muy bueno en posición totalmente automática y si se usa la opción de manejo secuencial es brillante, algo que será sin duda muy apreciado por los conductores en manejo por terreno montañoso y con el vehículo cargado. En cualquiera de las opciones de manejo la caja de cambios no desaprovecha revoluciones del motor.
Los frenos responden con suficiencia y en descensos ubicando la caja en segunda mediante el mecanismo secuencial se logra muy buen poder de retención.


Es un automóvil sólido y fuerte y que ha juzgar por el kilometraje recorrido ya por sus hermanos los Logan debe tener una longevidad destacable sin dar problemas. Las suspensiones son fuertes sin dejar de ser amables ni de buena tenida en curva  y su configuración sencilla y económica de reparar.
Su tecnología con la dosis justa de electrónica y tecnología, es la apropiada para países como los nuestros donde la población reclama vehículos económicos al adquirirlos y repararlos, que duren por mucho tiempo sin dar problemas y que al momento de venderlos sirvan como una base para poder adquirir uno nuevo.


Conclusiones
Esta versión sin duda ya hacía falta en el mercado local, donde cada vez más el cliente conoce y valora las cualidades de los vehículos con transmisión automática, una fenómeno que anteriormente no se presentaba. No sería extraño ver muy pronto un Renault Logan con esta caja automática para completar la amplia oferta de los modelos conocidos dentro del Grupo Renault como X90.

 

 

 

 

 

FICHA TECNICA
Motor

L4 16 Válvulas

Cilindrada
1.599 c.c.
Potencia
110 HP/5.750 rpm
Torque
15.10 Kgm/3.750 r.p.m
Alimentación
Inyección electrónica multipunto
Transmisión

Automática de 4 velocidades

Tracción

Delantera

Suspensión
Delantera: Independiente Pseudo McPherson
Trasera: Eje flexible en H
Dirección
Cremallera Asisitida
Frenos
Discos adelante y campanas atrás + ABS
Llantas
185/65 R15"
Visto 9560 veces Modificado por última vez en Jueves, 11 Mayo 2017 14:17