El último día de cada mes la noticia que acapara los titulares en todos los medios de comunicación, es la del aumento en el precio de la gasolina y en el a.c.p.m. Esta situación ya convertida en normal para muchos y agravada por los altos precios del petróleo a nivel internacional, están convirtiendo la utilización de un vehículo en algo demasiado oneroso, casi suntuario. Las cifras oficiales así lo certifican, al indicar que el consumo de gasolina ha bajado, mientras el parque automotor sigue creciendo como lo marcan las excelentes cifras de ventas de vehículos nuevos.

Ante un panorama tan oscuro hacía el futuro, la conversión de los vehículos para utilizar gas natural se constituye en una verdadera opción para miles de propietarios de vehículos en el país, que encuentran en este combustible un costo menor de este, frente a los combustibles tradicionales.

La presencia de este combustible en Colombia se remonta casi 20 años atrás, y acumula hoy en día una larga tradición en la Costa atlántica y el Huila, en ciudades como Barranquilla, Santa Marta, Cartagena, Montería, Sincelejo y Neiva. Lugares donde la gran mayoría de los vehículos de trasporte público se mueven con este combustible y donde existen bastantes estaciones de servicio que lo expenden.

Hace unos siete años, el gobierno de turno le dio un nuevo empujón a la masificación del nuevo combustible alternativo. En aquellos días se inició la conversión de muchos vehículos de servicio público y particulares. Se trajo capacitación, tecnología y experiencia de países como Italia y Argentina, lugares en los cuales entre el 80 y el 90% de sus vehículos se mueve con este combustible desde hace mucho tiempo y donde el desarrollo de la tecnología los ubica en un sitial de honor dentro de este campo.

Al comienzo se presentaron problemas con las conversiones, debidos principalmente a la falta de experiencia, y desconocimiento sobre la formulación de los equipos para que cada motor funcionara debidamente, esto creó desconfianza hacía el gas natural vehicular.

Afortunadamente hoy en día esos problemas propios de la niñez y juventud de cualquier innovación tecnológica han sido superados, gracias al trabajo conjunto realizado entre Ecopetrol, Gas Natural, Promigas y los talleres instaladores, que han realizado una ardua labor en aspectos como los análisis previos de los motores de los vehículos antes de instalarles el equipo de gas natural, mayor capacidad operativa y desarrollos tecnológicos.

•  Bajo costo del gas natural, frente a la gasolina. Casi el 50% menos, dependiendo del consumo del vehículo y de su utilización.

•  Un motor alimentado por gas natural, emite menor cantidad de sustancias nocivas para el medio ambiente

•  Mayor duración del aceite del motor y por ende mayor longevidad del bloque de este, ya que no se produce escurrimiento de gasolina al depósito de aceite, lo que lo degrada, haciéndole perder gran parte de sus propiedades antidesgastantes.

•  El motor funciona con gas o gasolina, accionando un sencillo conmutador

•  Mezclador del gas natural con el aire, más sofisticado que un carburador convencional.

•  La naturaleza de este combustible (gaseosa), le permite mezclarse de manera más eficiente con el aire produciendo una mejor combustión.

•  El gas tiene mayor octanaje que la gasolina corriente, por ende resulta más apropiado para motores con mayor índice de compresión

•  El funcionamiento del motor es más suave que con gasolina, y por ende resulta menos ruidoso y molesto para los ocupantes del vehículo.

•  Existen grandes reservas de este combustible en nuestro país.

•  Su precio permanece congelado por largos periodos de tiempo.

•  Es un combustible muy volátil, por eso en caso de accidente y escape, el gas natural se disipa fácilmente en la atmósfera.

•  El tanque de almacenamiento en el vehículo, es más fuerte y resistente a una colisión que un tanque de gasolina convencional. Además al requerir revisiones periódicas de carácter obligatorio, se previenen accidentes. Lo mismo sucede con el resto de componentes del kit de conversión.

•  El tanqueo se realiza de una manera más técnica y segura que el de la gasolina

•  El gas natural llega a la estación de servicio, de donde es bombeado al vehículo. No existen peligrosos depósitos de almacenamiento en el lugar de venta.

•  El motor desarrolla menor potencia y torque que con gasolina, entre un 8 y un 12%.

•  El costo del equipo de conversión

•  Recipiente de almacenamiento (Cilindro) de gran volumen y peso

•  Reducción de la capacidad de carga del vehículo, especialmente en automóviles

•  Limitada cantidad de estaciones de servicio que comercialicen gas natural, lo que reduce la autonomía de utilización del vehículo convertido. Este aspecto está mejorando, se están abriendo estaciones nuevas y se abrirán más próximamente de acuerdo a la demanda creciente.

•  Mantenimiento y sincronización del vehículo, únicamente realizable en talleres especializados

•  Requiere una puesta a punto del motor más precisa, para perder la menos cantidad de potencia y torque posibles.

• En el motor a convertir, las válvulas y los trenes de estas deben estar en perfecto estado, ya que el gas exige mucho más de estas partes que cuando trabaja con gasolina.

•  Todo vehículo con motor a gasolina es susceptible de funcionar con gas natural, mientras el estado de su propulsor sea óptimo, sin importar si el sistema de alimentación utiliza carburador o inyección.

•  El gas natural no daña los motores, algunos mecánicos utilizan esta disculpa, por desconocimiento del tema o como chivo expiatorio de sus errores o como disculpa o atenuante ante a su mala fe.

•  Antes de convertir su vehículo, exija la revisión previa del motor al taller que realizará el trabajo, lo que le garantizará el éxito de la conversión.

•  Desconfié de talleres callejeros o sin aval de Gas Natural, Promigas o cualquier otro operador serio. Si tiene dudas comunique se con el distribuidor mayorista de su lugar de residencia, ellos le indicarán en que sitio le hacen la conversión con seguridad y garantía.

•  En Bogotá, el costo de las conversiones lo regula Gas Natural, que en este momento ofrece un descuento entre $500.000 y $1.000.000 a las personas que instalen gas natural en sus vehículos. Existe un ranking de talleres consúltelo y elija bien.

•  Una vez convertido el vehículo siga al pie de la letra las instrucciones del instalador y lea atentamente el manual de utilización del equipo.

•  Cumpla con las revisiones obligatorias, así no perderá ni la garantía ni se le suspenderá el tanqueo.

•  A todo vehículo convertido en sitios autorizados, se le instala un chip que autoriza el abastecimiento. Este dispositivo electrónico se pone al vehículo en el momento en el que el ingeniero verificador y certificador de Icontec o Bureau Veritas revisa que la instalación cumple con los estándares de seguridad y calidad exigidos por las autoridades competentes.

•  Nunca y bajo ninguna circunstancia preste o permita que nadie tanquee un vehículo con el chip de otro vehículo, no sólo esto acarreará sanciones, sino que además se corre el riesgo de causar una tragedia, por que un vehículo sin chip o con este vencido, puede haber sido sometido a una conversión artesanal o no aprobada o por el contrario puede tratarse de un vehículo que no ha cumplido con las revisiones obligatorias.

•  No permita que cualquier persona u operario no capacitado, intervenga en la instalación.

•  Bajo ninguna circunstancia permita que se modifique, corte o añada el cilindro que almacena el gas natural. Cualquiera de estas prácticas lo dejará propenso a causar un accidente. Recuerde que este tanque se llena a 2.000 libras de presión.

•  El gas natural es un combustible muy seguro, mientras se manipule con responsabilidad y siguiendo las medidas de seguridad.