Por: Roberto Nigrinis Velandia

Para crear la XC90 se partió de la misma plataforma del S80, pero se aprovecha de una manera bien interesante lo que permite obtener mayor espacio interior, con una bien lograda aerodinámica y una sensación de manejo cercana a la de un automóvil, lo que se traduce en una experiencia muy placentera tanto para los siete ocupantes como para el conductor sin importar si se viaja en autopista, carretera sinuosa o destapada, permitiéndose acometer algunas travesías livianas fuera del camino con éxito, sin ser un campero.

Es suave, muy silenciosa, perfectamente insonorizada, con un gran equilibrio en sus suspensiones independientes, al amalgamar de manera muy acertada suavidad con rigidez, lo que permite viajar como en una gran berlina, con la tenida en curva y la estabilidad de un automóvil de prestaciones deportivas gracias a la incorporación de sistemas como el Control de estabilidad antivuelco RSC, el Control dinámico de estabilidad DSTC y de tracción TRACS, sistema automático de nivelación de la carrocería y control anti balanceo RSC, además del ABS, EBD y EBA que hacen su aporte desde el sistema de frenos.
Hablando de prestaciones, una anotación especial merece el motor, un poderoso 5 cilindros en línea, montado transversalmente, con un desplazamiento de 2.401 c.c, 20 válvulas (4 por cilindro), con doble árbol de levas. Este motor produce 185 HP/4.000 rpm y un torque de 38,7 Kgm disponible entre las 2.000 y las 2.750 rpm, alimentado por un sistema de inyección directa de combustible con Common Rail y apoyado por un turbo de geometría variable, el cual se acopla a una caja de cambios automática Geartronic de seis velocidades adelante con opción de manejo secuencial. Cuenta con tracción integral permanente en las cuatro ruedas AWD, con diferencial Haldex (similar al usado en el Volvo S60 AWD) con gestión electrónica que le permite repartir la tracción entre las ruedas, de acuerdo a la tracción que tenga en cada momento cada una de las ruedas.

En su construcción se ha utilizado tecnología de punta con aceros de alta resistencia y gran capacidad de absorción de energía en caso de colisión. Lo que también sucede con los acabados y la ergonomía del vehículo apuntan en la misma dirección. Cuero bicolor en las sillas, multiplicidad de opciones abatiendo o retirando las bancas, sobresaliendo la segunda y la tercera, destacándose esta última  que con simples movimientos se recoge y oculta en el piso en un abrir y cerrar de ojos.
La seguridad de los ocupantes también está bien estudiada como ya es una tradición en Volvo, 8 airbags, acompañan a los ocupantes. Además se le ha dotado de sistema WHIPS en los apoyacabezas de las sillas delanteras, que evitan lesiones cervicales en caso de choque y protección contra impactos laterales SIPS. Además de cinturones de seguridad de tres puntos con sistemas de pre tensión y apoya cabezas en todas la butacas, incluyendo anclajes Isofix para las sillas de los bebés y los niños pequeños.  

Sensación de manejo
Es un vehículo grande, perfectamente construido pensando en la comodidad, la ergonomía y la seguridad de sus ocupantes, que incluso gracias a su gran oferta de sistemas de seguridad corrige errores en la conducción, que en otro vehículo serían fatales. Tiene un motor espectacular, silencioso al extremo, que responde con contundencia desde las 2.000 rpm, pero que más debajo de este régimen no ofrece una brillante respuesta.
La caja de cambios es fabulosa, en manejo automático permite aprovechar el motor de manera acertada, mientras que en manejo secuencial no muestras vicios y caprichos permitiendo disfrutar de una conducción más deportiva al gusto del conductor y no del vehículo, algo desafortunadamente muy común en estos días de automatismos automotrices, en muchas otras marcas.

Las suspensiones están muy bien logradas y la marcha es irreprochable. En cuanto a frenos transmiten seguridad y precisión a cualquier velocidad, algo ya tradicional y obsesivo para este fabricante escandinavo. El sistema de frenos con discos en las cuatro ruedas hace su trabajo con brillantez.
La altura al piso es muy acertada y permite superar obstáculos aún muy grandes con total seguridad.
El equipamiento general es de primer nivel, lo mismo que sus acabados. El aire acondicionado, el techo corredizo, la dirección asistida con graduación del timón en altura y profundidad y los mandos del radio presentes en este complementan la propuesta.
Tiene un sistema de luces halógenas de gran calidad, al que se le suman exploradoras, y luz de niebla posterior.
Conducirlo es una delicia, se siente la calidad y el conjunto en general transmite seguridad a cualquier velocidad, al saber que se cuenta con el “Ángel Guardián” de las ayudas electrónicas, que en cualquier momento de emergencia nos socorrerán.
Su capacidad de carga es excelente, y cuenta con una tapa de baúl que abre en dos partes, con lo que se facilita el cargar y el descargar y se evitan ruidos molestos tan característicos de grandes portones posteriores.