Por. Roberto Nigrinis Velandia

Generalmente cuando Jeep presenta un vehículo nuevo sorprende y la Compass no ha sido la excepción. Esto también nos sucedió hace 6 años cuando probamos la Cherokee Liberty , que a simple vista nos pareció frágil, y luego de someterla a una exigente prueba debimos reconocer cuan equivocados estamos y como se cumplía al pie de la letra el conocido refrán que reza “Las apariencias engañan” dado su extraordinario rendimiento en las condiciones más extremas de uso, lo que también nos pasó con la Compass.

La Compass, llega con un ropaje imponente, con líneas modernas, limpias, originales y funcionales, dentro de las cuales se ha respetado al pie de la letra la forma de su frontal, que evoca al legendario Jeep (siete ranuras y faros redondos), que tantas hazañas ha logrado en el mundo entero en arduas labores civiles y militares en los más recónditos parajes del planeta, dando tanto renombre a la marca.

Tiene una carrocería de cinco puertas en la cual la aerodinámica se ha cuidado, para lograr un desplazamiento óptimo con el mínimo de ruido posible, esto último persiguiendo que los ocupantes se cansen menos durante sus desplazamientos dentro de la Compass. El único lunar los constituye la visibilidad posterior, que al igual que la mayoría de los vehículos actuales obliga a los conductores a convertirse en magistrales usuarios de los espejos exteriores, que para el caso de la Compass tienen generosas dimensiones.

Además su interior, al que se accede por unas amplias puertas ha sido sometido a un buen trabajo de diseño, que ubica los mandos y elementos muy cerca de las manos de quien los requiera y una amable ergonomía en las sillas. El panel de instrumentos es diáfano y los relojes suministran la información de forma clara, sobresaliendo el velocímetro que marca en millas y kilómetros simultáneamente, lo que no obliga a su fabricante a montar un instrumento para el mercado norteamericano y otro para los compradores de otras latitudes. El equipamiento es completo y se cuenta con aire acondicionado, radio con reproductor MP3, al igual que espejos, vidrios y bloqueo central de accionamiento eléctrico.

Además la seguridad de los pasajeros también ha sido trabajada a fondo, al construir una cabina sólida y perfectamente capacitada para absorber la energía generada durante una colisión sin que los cinco pasajeros sufran lesiones graves. Para contribuir con lo anterior se ha dotado a la Compass de cinturones de seguridad y apoya cabezas para todos los pasajeros a lo que se agrega doble airbag delantero y de cortina lateral.

Otros items destacados en el interior, los constituyen sus acabados, que se destacan por su calidad e impecable manufactura, al igual que la insonorización. El baúl también recibe plena aprobación, por su tamaño generoso, por su cubierta para equipajes y por la psibilidad de aumentar su tamaño con simplemente abatir los espaldares y la silla posterior. Precisamente en este lugar se encuentra uno de los elementos más originales, una lámpara que se desmonta convirtiéndose en una útil linterna de mano.

Aspectos mecánicos

Es propulsado por un moderno motor de cuatro cilindros en línea, fabricado en aluminio, de 2.400 c.c, con 16 válvulas de apertura variable VVT que actúa tanto sobre las válvulas de admisión como en las de escape con lo que se logra mayor potencia y torque, menor consumo de combustible y mayor amabilidad ambiental.

Este propulsor eroga 172 HP/6.000 rpm y un torque de 165 Libras pie/4.400 rpm y es alimentado por un sistema de inyección electrónica multipunto y sistema DIS. Se encuentra disponible la opción de una caja de cambios manual de 5 velocidades adelante (T355) o una transmisión CVT (Transmisión Continua Variable) que simula seis velocidades y que se activan de acuerdo a la velocidad, la aceleración y el terreno. La tracción actúa sobre las cuatro llantas permanentemente, mediante el sistema AWD Freedom Drive I, el cual reparte la tracción de manera automática, para cada llanta en virtud de la tracción que tenga cada una de ellas en cada momento y que demás permite bloquear el diferencial con lo que se reparte la tracción 50% y 50% entre el eje delantero y el trasero, algo necesario cuando se conduce por terreno suelto, mojado o muy resbaloso y donde las condiciones de adherencia de las ruedas están en un punto crítico y resultan peligrosas para la conducción.

Las suspensiones son independientes en las cuatro ruedas, con lo que la maniobrabilidad y la estabilidad se ven reforzadas. Adelante utiliza sistema McPherson, mientras atrás recurre a un sistema Multibrazo, con barra estabilizadora, que no sólo resulta suave y amable para los pasajeros, sino que además es resistente en malos caminos y mejora la conducción en condiciones de adherencia pobre y fuera del asfalto. La estabilidad se ve reforzada por la presencia del ESP (Programa Electrónico de estabilidad), lo mismo que por el montaje del TCS (Control de Tracción) y del TPM (Monitoreo de presión de llantas) que contribuyen a la seguridad al conducir. El sistema de dirección de cremallera con asistencia hidráulica, resulta muy preciso e indispensable para mover las llantas de 17 pulgadas.

El sistema de frenos con discos en las cuatro ruedas, servoasistido cuanta con ABS (Sistema antibloqueo) y EBD (Distribuidor electrónico de frenado) complementan el paquete de seguridad.

Sensación de manejo:

Se comporta como un automóvil tanto en el asfalto como fuera de él, con buena aceleración respuesta óptima durante maniobras de rebasamiento en carretera incluso en pendientes prolongadas, cruza bien y su estabilidad es muy buena, pese a la generosa altura sobre el piso. Sorprenden gratamente sus capacidades offroad, como lo pudimos disfrutar en la pista de Camper Cross del autódromo de Tocancipá durante el pasado Jeep Dual Experience donde no se amedrentaba ante el rendimiento de su primo el Jeep Rubicón, ofreciendo un comportamiento fabuloso y no esperado jamás al ver su estampa tan civilizada.