Este interesante y llamativo vehículo lanzado al mercado en el año 2005 evoca a la Chevrolet Suburban de 1949, gracias al riguroso trabajo del joven diseñador  norteamericano Bryan Nesbitt, creador también del conocido PT Cruiser de Chrysler unos años antes.

Por: Roberto Nigrinis Velandia

En esta carrocería de cinco puertas y dos volúmenes Nesbitt sintetizó el ADN del modelo de antaño y lo puso en escena en un vehículo moderno con un aire retro, que comparte plataforma con los actuales  Opel Astra y Chevrolet Cobalt.

La carrocería tiene ventanas pequeñas y por ende un poco oscura para las tendencias actuales, permite acomodar en su interior cinco pasajeros cómodamente, los cuales cuentan con todos los dispositivos de seguridad actuales y un baúl de buenas dimensiones, el que además puede variar su configuración cambiando la posición y altura de la bandeja que lo cubre y la cual  incluso se puede retirar, para mejorar su capacidad y también para dar acceso a la llanta de auxilio y a la batería. Lo sorprendente de este espacio para carga es su versatilidad, ya que posee una profundidad inimaginable a simple vista, lo que es un plus para el vehículo. Adicionalmente el espacio para carga aumenta de manera generosa al abatir parcial o totalmente la silla posterior, con lo que la posibilidad de transportar objetos voluminosos crece de manera muy destacada.

El interior es agradable y su diseño muy acorde con la propuesta general, destacándose el funcional panel de instrumentos cuyos relojes evocan también modelos de finales de los años 40 y comienzos de los 50 al incorporar sutiles círculos. Lo que si es bastante sencillo son los plásticos que cubren el panel y la parte superior de las puertas, lo que le quita brillo a la ejecución final de un producto muy bien logrado en todos los aspectos. La ubicación de los mandos es buena y se cuenta a bordo con aire acondicionado, doble airbag frontal, radio con reproductor de discos compactos, activación a voluntad del control de tracción, exploradoras y cinturones de seguridad para cada uno de los ocupantes. Además de vidrios, espejos exteriores y bloqueo central de accionamiento eléctrico, este último con la particularidad de activar los seguros una vez se saca la palanca de cambios de la posición Park y de desactivarlos una vez se regresa a la posición de parqueo. En el timón además de accionar un preciso sistema de dirección tipo cremallera cuenta con mandos para el manejo del radio, así como para el manejo del teléfono celular, la consulta del computador de a bordo que suministra información sobre consumo y velocidad promedio, lo mismo que autonomía de combustible y odómetro total y dos parciales y para el accionamiento del mecanismo que maneja la opción de velocidad crucero.

Las sillas ofrecen tapizados muy agradables tanto al tacto como a la vista y a su vez una posición de manejo deliciosa y sencillamente adaptable a los gustos y requerimientos de cada conductor, lo que invita a disfrutar del HHR siglas que significan High Highline Roof,  por largos periodos de tiempo sin importar los kilómetros que se recorran, debido al mínimo cansancio que producen.

Corazón mecánico
Esta movido por un motor de cuatro cilindros en línea, con 16 válvulas, y  un desplazamiento de 2.400 c.c que produce 172 HP/5.800 rpm y un torque de 22,4 Kgm/5.000 rpm y que se acopla a una caja de cambios automática de cuatro velocidades (Hydra-Matic 4T45 Transaxl que ofrece un funcionamiento excelente a su vez que aprovecha el motor de manera sobresaliente. Este motor puede ser utilizado hasta con 85% de etanol, algo útil y muy valorado en países como Estados Unidos pero no en Colombia.

Las suspensiones McPherson adelante y trasera con eje torsional y espirales. Mientras que el sistema de frenos recurre a discos adelante y campanas atrás con apoyo de  sistema ABS, EBD y TCS .
Esta calzada con llantas Firestone de 17 pulgadas y perfil 50.

Sensaciones al volante
Como ya lo decíamos el puesto de conducción es estupendo y los mandos sencillos y fáciles de accionar. La dirección con asistencia variable en función de la velocidad permite leer el camino. El manejo de muchos elementos desde el timón es algo que se agradece y valora ya que incrementa la seguridad al conducir y evita peligrosas distracciones.

El tablero de instrumentos es bastante agradable y suministra la información completa, aunque siguiendo la tendencia actual abusa de los testigos luminosos dejando muy poca información a las agujas.

La visibilidad es suficiente, pero no óptima dado el diseño de la carrocería que opta por ventanas pequeñas, situación que se solventa con los espejos de buenas dimensiones. Un acosa que queremos resaltar del parabrisas delantero es que por tener una inclinación mínima y un tamaño reducido no se convierte en una fuente de captación de energía solar y por ende de excesivo calor interior como sucede con la totalidad de los vehículos actuales.
La temperatura interior es agradable y si se siente calor se recurre al aire acondicionado y queda solucionado el impase.

En el apartado de iluminación, el interior cuenta con tres lámparas, mientras que en el exterior los faros delanteros ofrecen una luminosidad destaca, la cual puede mejorar aún al utilizar las exploradoras. Las ubicadas en la parte trasera también son estupendas destacándose las de reversa por su alcance y luminosidad.
El motor es muy silencioso a bajas revoluciones, aunque al exigirle se hace notar, pese a la bien lograda insonorización del vehículo. Este propulsor responde con gran eficiencia a la órden del acelerador y la caja de cambios contribuye de manera destacada al comportamiento brillante del propulsor. La caja de cambios de solamente 4 velocidades no presenta molestos saltos entre cambio y cambio y sus relaciones están bien escogidas, aunque con una transmisión de 5 o más velocidades mejoraría el ya de por si bajo consumo de combustible que en carretera supera los 55 kilómetros por galón, en ciudad los 32 kilómetros por galón y en conducción mixta los 45 Km/galón, cifras bastante contenidas para un motor de su cilindrada y más de 1.400 kilos de peso vacío.
Las suspensiones están bien logradas, lo que sumado a la comodidad de las sillas y a la eficiente insonorización permiten viajar con la comodidad tradicional de un vehículo estadounidense. Aunque hay que destacar que estas mismas suspensiones también permiten conducir por caminos quebrados de manera deportiva con total seguridad, a lo que también contribuyen las llantas de perfil bajo, que sin embargo sufren bastante con el pésimo estado de nuestras vías.
 La altura de despeje al piso es suficiente para no tener problemas, así a simple vista la HHR luzca muy baja.El sistema de frenos cumple con su cometido sin reproches.

Este Chevrolet Mexicano, fabricado en la planta de Ramos Arizpe, había sido presentado en el Salón del automóvil de Bogotá hace 2 años pero el precio poco competitivo hizo desistir a GM Colmotores de importarlo, lo que ya no sucede gracias a l trato preferencial que han logrado los productos aztecas en el mercado local que han permitido que el precio de introducción arranque en los 53 millones de pesos.
Es un vehículo diferente, llamativo y  original que no pasa desapercibido para nadie, para quien detesta lo convencional o para quien ama el estilo retro con la tecnología de hoy.