Yugo (1980-2008)

En 1950 el gobierno de Yugoslavia en cabeza del mariscal Josip Broz “Tito” vio la necesidad de contar con vehículos para el uso del ejército y algunas funciones del gobierno federal. Para tal fin entró en conversaciones con el fabricante de vehículos estadounidense Willys para ensamblar en su país el famoso Jeep que tan buenos servicios había prestado a los aliados durante la Segunda Guerra Mundial. Durante algún tiempo se logró el objetivo, pero debido a diferencias surgidas, el proyecto de ensamble terminó que dando libre una buena parte de la factoría, que además fabricaba armas.

Esta planta fundada en los años 30 en la ciudad serbia de Kragujevac ubicada a 80 kilómetros de Belgado la capital de dicha nación, inicialmente se dedicó exclusivamente a la fabricación de armas con destino a las tropas del ejército del Imperio Austrohúngaro. Posteriormente luego del firmar un convenio de fabricación de camiones con la Ford Motor Company lo que se desarrolló hasta el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, después de la guerra este convenio no se renovó.

Esto llevó a que en 1953 se creara la Zavodi Crvena Zastava (fábrica bandera roja) una compañía estatal que tendría como finalidad motorizar a Yugoslavia. En dicha planta se comenzó a trabajar inicialmente en el ensamble de vehículos Fiat italianos, a los cuales con el paso del tiempo se les fueron incorporando componentes de fabricación local, hasta llegar al 100% de partes de los vehículos producidos en el país balcánico.

De esta fructífera asociación surgieron los modelos que llevaron la marca Zastava. Dentro de ellos sobresalen el campero Fiat Campagnola, Fiat 1300, Fiat 1400, Fiat 1500, Fiat 750 Z, Fiat 128, Fiat 132 y Fiat 125 PZ para mencionar solo algunos. Sobresaliendo la versión Zastava 101 que era la versión yugoeslava del Fiat 128 que como particularidad contaba con cinco puertas, al ofrecer una compuerta trasera que lo convertía en casi una station wagon y qwue se vendió en Italia con la marca Innocenti. Este Zastava 101, se vendió en Colombia a donde llegó importado por la desaparecida Corporación Financiera del Transporte para servir como taxi entre los años 1981 y 1983, inicialmente con motor de 1.100 c.c y luego de 1.300 c.c. Vale recordar que esta factoría desde 1968 comenzó a producir camiones.

En 1977 el contrato con la Fiat expiró, lo que no impidió a la fábrica seguir produciendo los vehículos tradicionales ahora con la marca Yugo y pudiendo desarrollar unos nuevos con la tecnología del fabricante italiano, como fue el caso del Yugo 45, un modelo totalmente inédito, sobre la plataforma recortada del Fiat 128 (el mismo Zastava 101) y con una carrocería de tres puertas. De este modelo también tomaba la parte mecánica y el cual sería presentado en octubre de 1978.

Este modelo rápidamente se volvió un éxito, lo que incluso disparó su producción y exportaciones a otros mercados diferentes a los del este de Europa y a su país natal. Llegando incluso a desembarcar en el exigente y competido mercado de los Estados Unidos de la mano del empresario Malcolm Bricklin (quien fabricaría un automóvil deportivo con su nombre en Canadá durante esta misma época) y quien montó una amplia red de concesionarios a nivel nacional y que como estrategia comercial ofrecía al Yugo como el automóvil nuevo más barato de los Estados Unidos ya que costaba un poco menos de 4000 dólares. El negocio fue un éxito y durante los primeros años se vendieron a montones los Yugo. Pero como toda situación puede cambiar, un informe de Consumer Reports calificó muy mal al Yugo, denominándolo el peor automóvil de la historia. Esta información dada a conocer causó la inmediata caída en ventas. Entre 1985 y 1991 fueron vendidos 141.511 vehículos en el “país del tío Sam. Siendo 1987 el periodo de mayores ventas con 48.500 unidades y el peor 1991 con tan solo 3.981. No consideramos que sea el peor vehículo fabricado, y esto lo certifican los cientos de vehículos que aún circulan en Europa e incluso en Estados Unidos y los clubes de propietarios de estos automóviles tanto en la antigua Yugoslavia como en otros lugares del viejo continente que preservan con orgullo su legado. Pienso que siempre será más fácil resaltar lo negativo que lo positivo de cualquier cosa o situación de la vida. Además su bajo precio que se traducía en buenas ventas también se volvió algo molesto para otros fabricantes y vendedores de vehículos económicos nuevos y hasta de usados, a lo que se sumó su uso como motivo de burla para los humoristas y cineastas que lo tomaron como caballo de batalla para sus guiones y puestas en escena. Además el provenir de un país comunista no le ayudó mucho a revertir la situación. Finalmente la guerra generada al disolverse Yugoslavia afectó la fabricación de partes de repuesto y el despacho de las mismas a sus clientes finales lo que contribuyó a destruir aún más su ya maltrecha reputación.

Después de su salida del mercado estadounidense este modelo se siguió fabricando y vendiendo en el mundo con éxito hasta el año 2008 con diferencia en equipamiento, versiones y referencias, como es el caso de Koral, Van o  GV aunque en el fondo seguía siendo el modelo original remozado. En ese año la fábrica fue vendida al grupo Fiat que continúa produciendo modelos con su marca hasta nuestros días.

Propuesta técnica

Carrocería monocasco de tres puertas y dos volúmenes fabricada en acero y que incluso tuvo una versión convertible. Ruedas motrices delanteras. Motor de origen Fiat montado frontalmente de forma transversal y que se acoplaba a una caja de cambios manual de cinco velocidades hacía adelante y en algunas versiones entre 1990 y 1992 contó con caja de cambios automática. A lo largo de su vida el propulsor contó con dos cilindradas, la primera de 1.116 c.c de 8 válvulas que produce 55 HP y la segunda de 1.289 c.c que produce 67 HP con carburador doble o inyección electrónica multipunto Bosch. Frenos de disco adelante y campana atrás.
Medidas: Largo: 3,49 m; Ancho: 1,54 m; Alto: 1,34 m; Distancia entre ejes 2,15 m; Peso total: 790 Kilos; capacidad de combustible: 8,5 galones.

El Yugo en Colombia
Entre 1992 y 1994 se importó a Colombia, se vendió en poca cantidad y sus representantes locales nunca estuvieron a la altura de los requerimientos de los clientes al no contar con una red de servicio y repuestos suficiente lo que no permitió que sobresaliera. El modelo llegado a nuestro país contaba con el motor de 1.300 c.c alimentado por inyección electrónica Bosch en una época en que los carburadores eran la norma. Sobreviven muy pocos. Su precio de venta era de $7.300.000 pesos colombianos. En una prueba realizada por el periodista José Clopatofsky Londoño en la Revista Aló Carros número 2 del tercer trimestre de 1994 sobre automóviles con un precio inferior a los 10 millones de pesos de la época, el Yugo fue el ganador de la prueba de aceleración de 400 metros con salida parada con un tiempo de 20,42 segundos, superando a los otros 11 competidores entre los que se contaban el Mazda 323, el Renault 9, Chevrolet Sprint y Swift 1.0 y el Fiat Uno.

El Yugo 45 o posteriormente llamado 55 o 65, fue un modelo extremadamente sencillo, con el mínimo de accesorios y equipamiento, lo que lo convirtió en ideal para quien sólo busca un medio de transporte sencillo, básico y confiable y esto aún hoy en día siguen siendo sus mayores virtudes para sus miles de propietarios que aún los siguen usando a diario o que los conservan como vehículos antiguos en muchos lugares del mundo.